Democracia

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Después de una larga historia de injusticia, pobreza, autoritarismo, militarismo y desigualdad los sistemas políticos en Latinoamérica se ven afectados hasta el día de hoy por una precaria cultura democrática. Si bien habría que destacar la notable estabilidad en las prácticas democráticas básicas como elecciones o cambios de gobierno en las últimas décadas en casi todo el continente, la calidad de las democracias percibida por la ciudadanía en el día a día es –sin querer obviar particularidades regionales y nacionales– deficiente: un fuerte presidencialismo que reduce el rol de los parlamentos, el funcionamiento insatisfactorio de los poderes judiciales y de las fuerzas de seguridad, la falta de participación directa, la escasa oferta de sistemas de salud pública y educativos accesibles y de políticas públicas de contención social. Uno de los mayores retos para los sistemas democráticos en época de cambio climático y crisis global constituye en este contexto la persistente marginalización de amplios –y a veces mayoritarios– sectores de la ciudadanía  pobres e indigentes, que conlleva también una creciente exclusión del sistema democrático y significa una limitación de facto en el ejercicio de sus derechos.

Como Fundación queremos apoyar el reclamo democrático a través del fortalecimiento de las instituciones y la construcción de una ciudadanía activa y sustantiva que conozca y ejerza en plenitud sus derechos fundamentales. Pretendemos que en el pensamiento y las actitudes de la población se incorporen la tolerancia, el respeto a la diferencia y la equidad de género para enriquecer la vida social. La Fundación favorece y propicia la creación de espacios para el debate público de calidad. La relación sociedad civil – partidos políticos, los derechos ciudadanos y de consumidores, la construcción de valores ciudadanos, son temas que articulan y constituyen parte de nuestro quehacer.

La democracia de género es uno de los rasgos distintivos más importantes de la Fundación. Al mismo tiempo es tanto una tarea transversal como también un objetivo explícito. Nuestra idea de ella cuestiona la discriminación en cualquiera de sus formas, las injusticias y las relaciones jerárquicas existentes en los ámbitos jurídicos, económicos y sociales. Estimula la conciencia de hombres y mujeres sobre su identidad y sobre las características de las relaciones entre los géneros, haciendo de estas el foco principal de atención y poder replantear reflexiones y conceptos asociados a la equidad de género.

En este sentido, promovemos la incorporación de una perspectiva de género en instituciones públicas y organizaciones de la sociedad civil de forma transversal, que se relacione efectivamente con sus procesos de cambio estratégico. Se trata de hacer más efectivo el enfoque de género en la institución y de agregar un factor de calidad a los productos y servicios que ofrece tanto en lo interno como de cara a la ciudadanía. La Fundación trabaja también para visibilizar y superar las desigualdades que se dan entre hombres y mujeres en la participación política, económica y social, fomentando el desarrollo de metodologías y herramientas para analizar las relaciones entre género y economía, género y adaptación al cambio climático, entre otros temas relevantes de la región.